Durante todo el trayecto estuve pensando qué sería lo mejor ahora.
Opción 1: correr cobardemente.
Opción 2: tararear una canción de Edgar Ocerasky.
Opción 3: dejar de tener miedo y dejar que el viento me despeine.
Las ausencias ahora no son lo que debían ser. Y el filo de la cama ya no está vacío.
Creo que todo está mejorando.
Soundtrack: Sea of love - Catpower
Pardiez, querida.
ResponderEliminarLeer tus poemas es sentirse solidariamente zozobrado... como buscando el lado frio de la almohada con inquietud.